Tegucigalpa, Honduras.- A través de su cuenta de X, el presidente del Colegio de Abogados de Honduras solicitó reconsiderar la construcción de la cárcel de máxima seguridad en las Islas del Cisne, tras el anuncio del ministro de Serna sobre la aprobación de la licencia ambiental.
El presidente del Colegio de Abogados expresó: «Como ciudadano hondureño, me sumo a las distintas voces que piden al gobierno reconsiderar la construcción de la cárcel de máxima seguridad en la Isla del Cisne. Si bien es un proyecto de seguridad nacional, no podemos poner en riesgo nuestra seguridad ambiental y destruir nuestros ecosistemas. Debemos dar mayor importancia a la seguridad ambiental, ya que existen opciones para que esta cárcel pueda ser construida en tierra firme.»
Comparto algunos tratados y leyes que se estarían violentando, según expertos ambientales, con esta decisión:
1. Acuerdo de París de la Convención Marco sobre el Cambio Climático.
2. Protocolo de Nagoya sobre Acceso a los Recursos Genéticos y Participación Justa y Equitativa en los Beneficios que Deriven de su Utilización.
3. Convención sobre la Conservación de las Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS), en vigor desde 1983, la única convención global especializada en la conservación de las especies migratorias, sus hábitats y sus rutas de migración.
4. Protocolo de Kyoto de la Convención Marco sobre el Cambio Climático.
5. Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático.
6. Convenio sobre Diversidad Biológica.
7. Decreto Legislativo No.128-94, que declara Parque Nacional Marino: Abg. Agustín Córdova Rodríguez.
8. Decreto Ejecutivo No.3656-91, que designa como área protegida prioritaria.
9. Decreto Legislativo No. 107-2011, que declara las aguas territoriales marítimas como “Santuario de Tiburones”.
El presidente del Colegio de Abogados subrayó la necesidad de proteger los ecosistemas marinos de las Islas del Cisne, un área reconocida por su biodiversidad única. La construcción de la cárcel en esta zona podría tener consecuencias devastadoras para las especies y los hábitats locales. Según expertos, esta decisión podría contravenir varios acuerdos internacionales y normativas nacionales orientadas a la protección del medio ambiente.
La comunidad ambientalista ha levantado la voz en conjunto con otros sectores de la sociedad, insistiendo en la reubicación del proyecto a una zona que no represente un riesgo para los recursos naturales. Este llamado a la acción busca fomentar un desarrollo más sostenible y en armonía con la naturaleza.
En conclusión, la solicitud del presidente del Colegio de Abogados refleja una creciente preocupación por el medio ambiente y la necesidad de que el gobierno considere alternativas más ecológicas y viables para la construcción de instalaciones de seguridad. La protección de las Islas del Cisne debe ser una prioridad para preservar el patrimonio natural de Honduras para las futuras generaciones. Redacción Bruce Villatoro CEO QuienOpina.Com