Tegucigalpa, Honduras.- El Secretario de Seguridad Gustavo Sánchez ha destacado la importancia de construir una cárcel de máxima seguridad en las Islas del Cisne como una medida clave para albergar a los cabecillas de maras y pandillas de alta peligrosidad. Según el secretario, esta ubicación estratégica evitará la comunicación entre los delincuentes, lo que representa un avance significativo en la lucha contra el crimen organizado.
La construcción de la cárcel en la Isla del Cisne surge como una respuesta directa a la necesidad de reducir la operatividad de las estructuras criminales en el país. Sánchez explica que las condiciones geográficas y de acceso en la isla son idóneas para limitar las capacidades de comunicación y coordinación de los líderes criminales, dificultando su influencia desde dentro de las prisiones.
El ministro Sánchez subrayó la vulnerabilidad de las actuales prisiones, donde los miembros de mareros y pandilleros se agrupan cerca de sus jefes, perpetuando un círculo de violencia, extorsiones y desplazamientos forzosos. Con la nueva prisión en la Isla del Cisne, se espera romper este ciclo, asegurando que los cabecillas estén verdaderamente aislados y no puedan seguir controlando sus operaciones delictivas desde la cárcel.
Además, Sánchez explicó que el traslado a la nueva prisión se realizará bajo las herramientas jurídicas vigentes, enfocándose inicialmente en los líderes ya capturados. Esta medida es vista como un paso necesario para neutralizar la influencia de estos criminales de manera efectiva.
El secretario también anticipó que, con las reformas jurídicas propuestas por el gobierno, se prevé la captura de varios miles de miembros adicionales de estas estructuras criminales. Este año ya se han desmantelado más de 500 estructuras, involucrando a aproximadamente 5000 miembros. Este esfuerzo se verá fortalecido con la implementación de la figura de terrorismo, que permitirá actuar con mayor rigor contra estas organizaciones.
Finalmente, Sánchez reafirmó la necesidad de la nueva cárcel para dar cabida a todos los detenidos bajo las nuevas estrategias de seguridad, reiterando que esta medida es fundamental para mejorar la seguridad nacional y reducir el poder de las organizaciones criminales en el país. Con la prisión en las Islas del Cisne, el gobierno da un paso firme hacia la erradicación de la violencia y el fortalecimiento del estado de derecho. Redacción QuienOpina.Com