Tegucigalpa, Honduras.- La Coordinadora Residente de la ONU en Honduras, Alice Shackelford, ha expresado su preocupación por los elevados niveles de pobreza y desigualdad que enfrenta el país. Según Shackelford, estos problemas no solo persisten, sino que se han exacerbado por la falta de empleo*, afectando profundamente a la población más vulnerable.
Shackelford resaltó que la pobreza en Honduras sigue siendo alarmante, lo que demanda esfuerzos sostenidos y trascendentes que superen los cambios de gobierno. «Los niveles de pobreza son todavía demasiado altos, lo que requiere esfuerzos más prolongados y que trasciendan gobiernos«, enfatizó. Este es un desafío que no puede ser ignorado y que requiere una atención integral y colaborativa.
El desempleo es otro de los grandes problemas que enfrentan los hondureños. La falta de oportunidades laborales agrava la situación de pobreza, perpetuando un ciclo difícil de romper. Shackelford señaló que esta situación es especialmente preocupante en Honduras, donde la desigualdad es un factor que amplía la brecha entre los grupos sociales.
La coordinadora resaltó que la desigualdad en el país afecta desproporcionadamente a los grupos más vulnerables, aumentando las tensiones sociales y dificultando el acceso equitativo a recursos. «Hay una concentración de personas que controlan los recursos, mientras que la mayoría carece de ellos», afirmó. Esta concentración de riqueza y poder no solo es un problema local, sino que también refleja una tendencia preocupante a nivel mundial.
A pesar de estos desafíos, Shackelford reconoció los esfuerzos en marcha para abordar estos problemas. La ONU está trabajando en procesos, leyes y políticas orientadas a la protección social en Honduras, buscando crear un impacto positivo a largo plazo. Sin embargo, subrayó la importancia de mantener un diálogo constante entre todos los actores involucrados para asegurar la eficacia de estos esfuerzos.
En conclusión, Shackelford instó a que el diálogo prevalezca en la búsqueda de soluciones a los problemas de pobreza y desigualdad. Solo mediante un enfoque coordinado y sostenido se podrá lograr un cambio real y duradero en la calidad de vida de los hondureños. Redacción Martha C.C.