«Los resultados están a la vista, Política Limpia nunca ha fiscalizado las campañas electorales», afirma Yllescas.
Puerto Cortés, Honduras.- El exvicepresidente del Congreso Nacional, Enrique Yllescas, criticó con dureza a la Unidad de Financiamiento, Transparencia y Fiscalización (UFTF), conocida como Política Limpia, asegurando que se trata de un «elefante blanco» que no cumple con su misión de regular el financiamiento de los partidos políticos y garantizar la transparencia en las campañas electorales.
En sus declaraciones, Yllescas fue enfático en señalar que este organismo nunca ha sido eficaz en su tarea de fiscalización, permitiendo que fondos de dudosa procedencia se sigan infiltrando en la política hondureña sin control.
«Hay un elefante blanco con presupuesto que nunca ha fiscalizado. Los resultados están a flor de piel. ¿Quiénes han llegado al poder? ¿Cómo se han financiado los partidos durante décadas? La respuesta es clara y preocupante», cuestionó.
Un sistema permeado por dinero ilícito
Yllescas denunció que el dinero del narcotráfico y el lavado de activos han permeado el sistema de partidos políticos en Honduras, convirtiéndose en una fuente de financiamiento innegable. Aseguró que el problema es tan profundo que ninguna institución política está exenta de tener miembros con vínculos con el crimen organizado, algunos incluso extraditados a Estados Unidos.
«Es un secreto a voces que el dinero ilícito ha financiado campañas en Honduras. Pero nadie quiere hablar de eso, porque les conviene el silencio. No existe una voluntad real para frenar este flagelo, y mientras eso no cambie, el narcotráfico seguirá teniendo injerencia en la política nacional», advirtió.
El exvicepresidente del Congreso explicó que las regulaciones son débiles y las sanciones casi inexistentes, lo que ha permitido que el financiamiento irregular de campañas sea una constante en cada proceso electoral. Según él, Política Limpia ha sido cómplice de esta situación al no tomar acciones concretas para evitar el ingreso de dinero sucio en las elecciones.
Parálisis de proyectos y retraso en la aprobación del presupuesto
Yllescas también señaló que la falta de credibilidad de Política Limpia ha generado serios inconvenientes a nivel institucional, afectando el desarrollo de proyectos de cooperación internacional. En este sentido, mencionó que el organismo ha sido responsable de la paralización de proyectos con la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), lo que ha limitado recursos clave para la supervisión del financiamiento político en Honduras.
Además, indicó que la aprobación del presupuesto en el país ha sido lenta debido a la ineficiencia de las instituciones encargadas de regular los fondos públicos, permitiendo que los mismos actores políticos sigan manejando los recursos sin transparencia ni rendición de cuentas.
La corrupción institucionalizada y el engaño a la población
Para Yllescas, el problema no solo radica en la falta de regulación, sino en la normalización de la corrupción dentro del sistema político hondureño. Señaló que el discurso de la transparencia ha sido utilizado como una cortina de humo para engañar a la ciudadanía, mientras que en la práctica, las instituciones siguen operando bajo la misma lógica de impunidad y encubrimiento.
«No podemos seguir viviendo del discurso de la mentira. Instituciones como estas solo sirven para legitimar a una clase política corrupta, financiada por los narcos. Es inaceptable que el país siga destinando presupuesto a organismos que no cumplen su función y que solo existen para simular control», aseveró.
Yllescas concluyó sus declaraciones haciendo un llamado a la sociedad hondureña para exigir cambios estructurales en la fiscalización del financiamiento político, asegurando que, de no tomar medidas urgentes, Honduras seguirá siendo rehén de intereses oscuros que operan desde las esferas más altas del poder.
El papel de la ciudadanía en la lucha contra la corrupción
El exdiputado insistió en que la única forma de combatir esta crisis es a través de la presión social y la exigencia de reformas que permitan una verdadera fiscalización del financiamiento electoral.
«La corrupción sigue creciendo porque los ciudadanos la permiten. Es momento de cuestionar a quienes manejan los fondos de los partidos políticos y de exigir auditorías reales, independientes y sin intereses partidarios. Solo así podremos frenar el avance del narcotráfico en la política hondureña», concluyó.
La denuncia de Yllescas reaviva el debate sobre la eficacia de Política Limpia, un organismo que ha sido señalado en múltiples ocasiones por su falta de acción y transparencia. La pregunta que queda en el aire es si el gobierno tomará medidas para reformar este ente o si seguirá operando bajo la misma ineficiencia que ha caracterizado su gestión hasta el momento. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com