El expresidente del CCPN advierte sobre las dificultades políticas del Partido Nacional y la importancia de la unidad interna
El expresidente del Comité Central del Partido Nacional (CCPN), David Chávez, ha señalado que las decisiones políticas tomadas en su ausencia durante los últimos meses podrían tener consecuencias negativas para su partido en las próximas elecciones generales. Según Chávez, los números del PN descendieron en los recientes comicios, por lo que es vital que se trabaje arduamente para ganar las elecciones presidenciales y legislativas de noviembre.
En su discurso, Chávez hizo un llamado directo a Nasry Asfura, presidente de la Corporación Municipalista Nacionalista (CMN), instándolo a buscar a los expresidenciables nacionalistas y cerrar un pacto de unidad. Chávez advirtió sobre una negociación política con el expresidente Manuel Zelaya, alertando de una posible debacle política si no se toman medidas adecuadas en los próximos meses.
A pesar de sus relaciones personales con Tito Asfura, Chávez destacó que la gestión política de Asfura ha sido «muy mala». «No se puede lavar las manos», afirmó, en referencia a las negociaciones mal conducidas por Asfura, quien, según el exlíder, asumió la responsabilidad de situaciones políticas críticas, como la elección de los representantes del Tribunal de Cuentas y del Ministerio Público.
Chávez también expresó que es urgente que Nasry Asfura sea más contundente en sus propuestas, pidiendo que se enfrente a Salvador Nasralla y Rixi Moncada en debates públicos para demostrar que el PN tiene un candidato preparado y decidido. Aseguró que «con abrazos y besos no se ganan las elecciones» y que es esencial que Asfura se comprometa con un liderazgo más firme.
El expresidente del CCPN calificó las elecciones primarias del Partido Nacional como «inéditas» y acusó a algunos actores políticos de haber trabajado para impedir que los ciudadanos ejercieran su derecho al voto, lo que sería una «mala voluntad» contra la democracia en el país.
En cuanto a la posibilidad de una alianza con el Partido Liberal, Chávez fue claro al señalar que tanto Nasralla como Asfura no cederán la cabeza de la candidatura presidencial, sugiriendo que esta opción no será viable. «Será el pueblo hondureño quien decida al final», añadió.
Por otro lado, reveló que Asfura gastó una desproporcionada cantidad de dinero, alrededor de 40 millones de lempiras, en su campaña primaria, mientras que su contrincante Ana García apenas invirtió 200 mil lempiras. «Aquí la competencia era muy desproporcionada», remarcó Chávez, quien reconoció el esfuerzo de aquellos que compitieron con limitados recursos.
El futuro del Partido Nacional está en juego, y la unidad interna será clave para poder enfrentarse con éxito a los retos políticos que se avecinan en las elecciones generales de noviembre. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com