Tegucigalpa, Honduras.- El exfiscal general del Ministerio Público, Edmundo Orellana Mercado, denunció públicamente la grave omisión del Congreso Nacional al no ratificar las actas legislativas, cuestionando si esta práctica constituye una maniobra deliberada para legalizar actos con indicios de corrupción.
El experto en derecho constitucional hizo énfasis en el artículo 10-A de la Ley Orgánica del Poder Legislativo, el cual establece que la aprobación de actas y sus reconsideraciones son parte obligatoria de la función legislativa. Al no cumplir con este mandato, afirmó Orellana, se abre la posibilidad de responsabilidad jurídica por omisión dolosa.
“¿Se puede entender, a contrario sensu, que existe responsabilidad por no ejercer la función legislativa como se ordena en dicho artículo?”, cuestionó en sus redes sociales, señalando un patrón alarmante de omisiones sistemáticas que podrían estar al servicio de intereses ocultos.
La advertencia del exfiscal surge en el marco de la reciente publicación en La Gaceta de préstamos multimillonarios con la Corporación Andina de Fomento (CAF), aprobados en el Congreso sin que se haya ratificado el acta correspondiente a dicha sesión. Este hecho ha sido calificado como ilegal por diversos sectores, dado que la ratificación del acta es el documento jurídico que legitima cualquier decisión parlamentaria.
Para Orellana, esta irregularidad no es un simple descuido, sino una señal preocupante de cómo se manipulan procedimientos legislativos para legalizar decisiones sin sustento formal, especialmente cuando hay recursos públicos de por medio. La falta de actas firmadas y aprobadas podría ser utilizada como escudo para encubrir decisiones arbitrarias, favorecimientos financieros y actos de corrupción.
Organismos de sociedad civil y analistas coinciden en que el Congreso Nacional, encabezado por Luis Redondo, se encuentra bajo una creciente sombra de opacidad, autoritarismo y manipulación normativa, debilitando los controles democráticos y aumentando el riesgo de fraudes institucionales.
Orellana, quien ha sido una de las voces más firmes contra la corrupción en Honduras, concluye que la omisión reiterada de aprobar actas legislativas no solo desnaturaliza el rol del Congreso, sino que podría constituir un mecanismo de blindaje para actos ilícitos, con implicaciones legales para quienes participan o permiten estas prácticas. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com