Vigilantes del Hospital Escuela hostigan a periodista y la obligan a borrar evidenciaVigilantes del Hospital Escuela hostigan a periodista y la obligan a borrar evidencia

Tegucigalpa, Honduras.- Una grave denuncia de restricción a la libertad de prensa se registró este viernes en el principal centro asistencial del país, el Hospital Escuela, donde un grupo de vigilantes hostigó y obligó a la periodista Daniela Pacheco, de la reconocida radioemisora HRN, a eliminar material audiovisual capturado durante una cobertura informativa.

Según relató la comunicadora, su visita al hospital tenía como propósito verificar el acceso real de los pacientes a los medicamentos en el área de farmacia, la cual se encontraba saturada. En ese contexto, un paciente intentó colarse en la fila, provocando molestia entre los demás presentes. En medio del caos, llegaron cuatro agentes de seguridad para controlar la situación justo cuando ella grababa con su celular.

Me arrinconaron, amenazándome con que iban a traer a las mujeres guardias para que me pusieran en mi lugar si no borraba el video”, denunció Pacheco. Añadió que, a pesar de explicar que se trataba de una labor periodística y que no había ninguna intención de comprometer la seguridad del recinto, los vigilantes insistieron de forma agresiva, obligándola a borrar el video e incluso a vaciar la papelera del dispositivo móvil.

Tras la eliminación del material, la situación se tornó aún más intimidante: los vigilantes continuaron siguiéndola dentro del hospital. “Me escondí en un rincón porque un paciente me advirtió que me estaban buscando para sacarme del hospital”, relató la periodista visiblemente afectada.

Ante la denuncia pública, el director del Hospital Escuela, Hebert López, se comprometió a investigar lo ocurrido. “Me comunicaré con el jefe de seguridad para aclarar lo sucedido y tomar las medidas correctivas necesarias. Este tipo de situaciones no deben repetirse”, declaró.

Organizaciones defensoras de la libertad de prensa han comenzado a pronunciarse sobre el incidente, considerándolo un claro atentado contra el ejercicio periodístico y un acto de censura en espacios públicos donde la vigilancia de los servicios de salud es una tarea ciudadana y democrática. Redacción Ruth Corrales

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!