Yllescas alerta ambiente electoral que desata caos financiero inminenteYllescas alerta ambiente electoral que desata caos financiero inminente

Tegucigalpa, Honduras | HonduPrensa.Com – Honduras vive un ambiente sofocante, cargado de una tensión que penetra comercios, familias, instituciones y hasta los espacios más cotidianos. A pocos días de las Elecciones Generales, el país se mueve con un miedo que no nace de la imaginación, sino de señales directas enviadas desde el poder. El exvicepresidente del Congreso Nacional, Enrique Yllescas, afirma que se está construyendo un escenario de pánico inducido para justificar acciones irregulares el día de las votaciones.

Los hechos son imposibles de ignorar: donde deberían levantarse adornos navideños, hoy se levantan barricadas comerciales. Los negocios están blindando sus fachadas como si se prepararan para una guerra urbana. La población siente que algo oscuro se está moviendo detrás del telón político y que la respuesta del oficialismo ante una posible derrota podría desatar la tormenta que todos temen.

Las escuelas cancelan clases presenciales. Los bancos analizan turnos mínimos. Las empresas activan protocolos de teletrabajo como si se tratara de un país en emergencia permanente. Todo porque la posibilidad de que el partido de gobierno desconozca la voluntad popular se ha vuelto demasiado real.

Yllescas lanza una advertencia frontal: “No es normal que el país esté paralizándose antes de votar. No es accidental. Es una estrategia de intimidación”. Sus declaraciones han encendido un debate nacional que golpea directamente a la economía, ya que diciembre representa la columna vertebral del ingreso anual para miles de hondureños.

Las consecuencias de un escenario fraudulento serían catastróficas. No solo habrá protestas internas: la comunidad internacional aplicará sanciones, cortará financiamiento y aislará a Honduras como lo ha hecho con gobiernos que rompieron el orden democrático. El país quedaría expuesto, vulnerable y sin respaldo económico, empujando a millones a una crisis sin precedentes.

Por eso el mensaje es claro y agresivo: la única defensa es un voto masivo, capaz de romper cualquier intento de manipulación. Cuanta más contundencia haya en las urnas, menos espacio tendrá el oficialismo para maniobrar. La población debe ejercer su poder con tal fuerza que no quede duda alguna sobre el mandato ciudadano.

Además, el país necesita que el candidato del segundo lugar actúe con valentía cívica, reconociendo los resultados sin vacilación para impedir que se instale el caos. La grandeza democrática será el escudo final contra la violencia que muchos temen.

Honduras no puede caer en un abismo fabricado desde el poder. El 30 de noviembre no será solo una elección: será un juicio histórico. Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!