Tegucigalpa, Honduras.- El arzobispo de Tegucigalpa, José Vicente Nácher, exhortó este día a la feligresía a esperar con paciencia, fe y buen ánimo el nacimiento de Jesús, recordando que la Iglesia atraviesa el tiempo de Adviento, un periodo espiritual marcado por la reflexión, la esperanza y la preparación interior.
Durante su mensaje pastoral, el prelado explicó que el Adviento representa un tiempo de espera confiada, en el que los creyentes se preparan para el nacimiento de Dios hecho hombre, un acontecimiento que renueva la fe y fortalece el espíritu cristiano. Subrayó que esta etapa invita a mirar con serenidad las dificultades cotidianas y a transformarlas en una oportunidad de crecimiento interior.
“Nuestras dificultades y contrariedades son una ocasión para purificar el espíritu y fortalecer la fe”, señaló Nácher, al tiempo que animó a los fieles a no perder la esperanza en medio de la incertidumbre y el cansancio social que atraviesa el país.
El arzobispo destacó que la llegada de Jesús representa un mensaje de consuelo y fortaleza para un pueblo que en ocasiones se siente fatigado y desanimado. “Aguardamos al que viene a sostener las rodillas vacilantes de un pueblo cansado”, expresó, resaltando que la fe es un pilar para recuperar la alegría y la confianza.
Finalmente, llamó a vivir este tiempo litúrgico con una actitud positiva y solidaria, reafirmando que la espera confiada y la certeza del encuentro con Cristo llenan de alegría el corazón de los creyentes, fortaleciendo los lazos familiares y comunitarios en la antesala de la Navidad. Redacción Ruth Corrales