Tegucigalpa, Honduras | HonduPrensa.Com – Un choque institucional sacude el proceso tras la acusación directa de Tomás Zambrano, quien responsabilizó a Libre junto a aliados por congelar el escrutinio al rehuir la integración de las JEVR pese a contar con acreditaciones vigentes. La denuncia describe una maniobra coordinada para impedir el cierre presidencial.
Zambrano fue categórico: la ausencia no es casualidad, es táctica. Afirmó que el doble discurso queda al descubierto cuando quienes exigen recuento evaden verificar. Según su lectura, el libreto busca extorsionar al árbitro, estirar plazos e instalar caos para revertir un desenlace que no les favorece.
El parlamentario advirtió que el bloqueo erosiona la certeza electoral, alimenta conflicto social e intenta forzar decisiones fuera del procedimiento. Recalcó que el conteo completo es la única vía legítima, por lo cual boicotearlo equivale a desconocer al electorado.
Las alertas institucionales se reforzaron con los señalamientos de la consejera Cossette López, quien reportó presiones indebidas, incidentes violentos e interrupciones causadas por acreditados que no cumplieron su rol. López sostuvo que se intenta imponer recuentos paralelos al margen de la ley, bloqueando el inicio de los escrutinios especiales.
Zambrano insistió en que el Partido Nacional no permitirá que la obstrucción se normalice. Anunció vigilancia permanente, denuncias formales e impulso de medidas firmes para cerrar el proceso con transparencia verificable. “Quien cree en democracia verifica. Quien boicotea teme”, concluyó. Redacción Laura Valladares.


