Tegucigalpa, Honduras.- La diputada hondureña Beatriz Valle regresó recientemente al país tras renunciar a su cargo como embajadora en Canadá. Desde su retorno, se ha pronunciado enérgicamente sobre la violencia política contra las mujeres a través de su cuenta en X. En un contundente mensaje, Valle expresó: «WOW cómo ha cambiado Honduras en año y medio. POR FIN se visibilizó el tema de la violencia política contra las mujeres. Tal vez así despiertan las organizaciones de derechos humanos».

Valle, quien ha sido víctima de este tipo de violencia, lanzó duras críticas a las organizaciones que, según ella, mantuvieron silencio mientras era agredida de manera «acosadora, vulgar, amenazante y calumniosa». La diputada señaló que muchas de estas organizaciones, que se autodenominan defensoras de los derechos de las mujeres, actuaron de forma «cómplice, arrimada, desvergonzada», al no salir en su defensa. Estas palabras reflejan la frustración y el llamado de atención hacia la falta de apoyo que perciben muchas mujeres en la esfera política.

En su pronunciamiento, Valle también instó a las mujeres a unirse y fortalecerse: «¡Mujeres: tenemos que ser mejores!», subrayando la necesidad de cambiar actitudes y luchar más firmemente por los derechos de las mujeres, especialmente en el ámbito político. Esta declaración es una clara llamada a la acción para que las mujeres se conviertan en agentes de cambio y confronten la violencia política desde una postura unida y decidida.

La problemática de la violencia política contra las mujeres en Honduras es un tema constante. En las últimas semanas, ha ganado más relevancia, especialmente tras los ataques de funcionarios hacia sus colegas, como es el caso del magistrado Marlon Ochoa en el Consejo Nacional Electoral (CNE). Este aumento en la visibilidad del tema es esencial para generar conciencia y exigir protección de los derechos de las mujeres en el escenario político.

Valle, sin embargo, también reconoció que, a pesar de los recientes ataques, existe un notable incremento en la visibilidad y el reconocimiento de esta forma de violencia. Este cambio significativo en la conciencia pública es un paso importante hacia las demandas por justicia y protección de los derechos de las mujeres. La diputada subraya que la lucha continúa, y que la visibilización es el primer paso para erradicar la violencia política contra las mujeres. Redacción Allan Cerrato.

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!