San Pedro Sula, Honduras.- La empresa Tabacalera Hondureña S.A. anunció este lunes el cierre de sus operaciones de producción, estableciendo únicamente un centro logístico para la distribución de cigarrillos en Honduras. Esta decisión marca un importante cambio en la estructura de una de las compañías más emblemáticas del país.

Desde su fundación en 1928, Tabacalera Hondureña ha sido un pilar fundamental en la economía del país, siendo un destacado productor y exportador de cigarrillos. Sin embargo, la compañía decidió cesar su producción local como parte de una estrategia global de British American Tobacco (BAT) para mejorar eficiencias operativas y adaptarse a los cambios en la industria tabacalera.

A pesar del cierre de la planta de producción, BAT Honduras continuará siendo responsable de la distribución y comercialización de sus productos en el país. La empresa aseguró que estos cambios no tendrán ningún impacto negativo en sus clientes y proveedores en el ámbito comercial, garantizando la continuidad del servicio y la calidad de sus productos.

En su comunicado, la compañía mencionó que está reubicando a varios de los colaboradores afectados en otras fábricas y ofreciendo paquetes de salida que superan los requisitos legales para aquellos que se vean perjudicados por el cese de la producción. Esta medida busca mitigar el impacto económico y social del cierre de la planta, demostrando el compromiso de BAT con sus empleados.

La decisión de cerrar la planta de producción en Honduras se enmarca en una estrategia más amplia de BAT para consolidar y optimizar sus operaciones a nivel mundial. Esta estrategia incluye la adaptación a nuevas normativas y tendencias del mercado, así como la implementación de tecnologías más eficientes en sus procesos productivos.

El cierre de Tabacalera Hondureña no solo refleja los desafíos actuales de la industria tabacalera, sino también las oportunidades para reinventarse y adaptarse a un entorno en constante cambio. BAT está invirtiendo en nuevos modelos de negocio y productos innovadores que responden a las preferencias cambiantes de los consumidores, apuntando hacia un futuro sostenible y rentable.

Con más de 90 años de historia en Honduras, Tabacalera Hondureña deja un legado significativo en la economía y cultura del país. Su cierre representa el fin de una era, pero también el inicio de una nueva etapa en la que BAT continuará siendo un actor relevante en el mercado, enfocado en la excelencia operativa y la satisfacción del cliente. Redacción Laura Valladares.

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!