Tegucigalpa, Honduras.- El gerente de política económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), Santiago Herrera, lanzó una alarma sobre la crisis laboral que afecta a millones de hondureños y criticó fuertemente la falta de interés político en ofrecer soluciones eficaces. En sus declaraciones, Herrera destacó que el empleo debe ser una prioridad nacional, pero lamentó que esta problemática no esté siendo abordada adecuadamente por los líderes políticos del país.

Según el directivo del Cohep, uno de los sectores más afectados por la crisis de empleo es la juventud. De los 4 millones de hondureños que conforman la fuerza laboral, aproximadamente 937,000 jóvenes no están trabajando ni estudiando. Esto no solo implica una pérdida para la producción y los ingresos de las familias, sino que también pone en riesgo el futuro económico del país, ya que estos jóvenes no se están capacitando adecuadamente para insertarse en el mercado laboral.

Herrera explicó que la falta de educación y empleo adecuado está perpetuando un ciclo de pobreza en Honduras. «Si los jóvenes no se preparan adecuadamente, no podrán ser productivos ni generar ingresos, lo que genera un círculo vicioso de pobreza», destacó. Esta situación podría tener consecuencias devastadoras para el desarrollo económico y social del país en los próximos años.

Otro aspecto crítico señalado por Herrera es la creciente dependencia de las remesas como principal fuente de ingresos para muchos hogares. «El 40 por ciento de los hogares hondureños depende de las remesas», afirmó el experto, agregando que esta dependencia está afectando la capacidad del país para generar empleo formal y fortalecer su economía interna.

Además, Herrera advirtió que la falta de empleo y la baja tasa de educación en el país están impidiendo que Honduras aproveche su bono demográfico. A pesar de que la pirámide poblacional indica que los jóvenes deberían estar en capacidad de sostener a los adultos mayores, este objetivo no se alcanzará si no se toman medidas urgentes para mejorar el empleo y la educación en el país.

Otro dato alarmante presentado por el gerente del Cohep es que más del 72 por ciento de los trabajadores hondureños están empleados en el sector informal, lo que significa que no tienen acceso a beneficios sociales ni a salarios dignos. Esta situación genera una inseguridad laboral que agrava aún más la crisis económica.

Para el Cohep, es esencial que las autoridades y los precandidatos políticos hagan del empleo un tema central en sus propuestas. «Solo el 43 por ciento de las mujeres participa en el mercado laboral, en comparación con el 78 por ciento de los hombres», señaló Herrera, añadiendo que esta desigualdad también debe ser atendida para fomentar la inclusión y el desarrollo económico en el país.

Conclusión: La crisis de empleo en Honduras exige soluciones inmediatas. La falta de acción política ante este problema está afectando a millones de hondureños, especialmente a los más jóvenes. Para superar este desafío, es necesario un compromiso real de los líderes políticos, el fortalecimiento de la educación, la promoción del empleo formal, y el impulso de políticas que reduzcan la dependencia de las remesas y generen oportunidades laborales para toda la población. Redacción Laura Valladares.

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!