Tegucigalpa, Honduras | HonduPrensa.Com – La parálisis del proceso electoral eleva la presión política. Roberto Contreras, líder del CCEPL, advirtió que la ausencia de una respuesta inmediata abre la puerta a un caos social y a una prolongación del poder, si no se activa una mediación neutral con capacidad técnica y respaldo internacional.
Desde su pronunciamiento público, Contreras enfatizó que el conflicto superó la capacidad interna de resolución, por lo que insistió en un manejo de crisis profesional, con criterios imparciales y garantías verificables. Para el dirigente, sostener el bloqueo socava la credibilidad del árbitro electoral y profundiza la polarización.
El foco de tensión se mantiene en las Juntas Receptoras de Votos, donde impedimentos al escrutinio especial retrasan al CNE en su camino hacia la declaratoria oficial. Este escenario cronifica la incertidumbre, debilita la confianza pública y alimenta narrativas de confrontación.
Contreras alertó que la confrontación social se vuelve más probable cuando la ciudadanía percibe reglas inciertas y plazos indeterminados. Por ello, propuso una salida técnica que combine mediación neutral, transparencia operativa y comunicación clara para cerrar el proceso con legitimidad.
El llamado apunta a destrabar el escrutinio, restablecer certidumbre y evitar un quiebre político con impactos económicos y sociales. La señal es inequívoca: resolver ahora, con neutralidad, para proteger la democracia. Redacción Hansell Ordoñez.

