Edmundo Orellana exige a la PGR frenar despilfarro por despidos ilegalesEdmundo Orellana exige a la PGR frenar despilfarro por despidos ilegales

Tegucigalpa, Honduras.- El exfiscal general y exministro de Transparencia, Edmundo Orellana, alzó la voz este jueves para denunciar la inacción de la Procuraduría General de la República (PGR) ante las crecientes condenas millonarias por despidos ilegales de empleados públicos, que siguen afectando las finanzas del Estado hondureño.

En una publicación en su cuenta oficial de X, Orellana fue enfático: “Se acumulan condenas millonarias contra el Estado… ¿Por qué la inacción de la PGR? ¿Incurre en responsabilidad por no actuar?”. El jurista hizo referencia directa a la acción de repetición, mecanismo constitucional que permite al Estado recuperar fondos públicos exigiendo el reintegro a los funcionarios responsables de decisiones arbitrarias.

Los señalamientos de Orellana surgen en un contexto en el que múltiples instituciones han sido condenadas judicialmente por violaciones al debido proceso, despidos sin causa justificada, y decisiones administrativas que vulneran los derechos laborales. Estos errores sistemáticos han derivado en pagos multimillonarios, provenientes del erario nacional.

En su crítica, el exfuncionario recordó un artículo de opinión de 2016, donde ya advertía que muchos despidos en la administración pública se ejecutan de forma “caprichosa” para favorecer a correligionarios o familiares, despreciando los procedimientos legales establecidos.

La acción de repetición, poco utilizada por la PGR según Orellana, debería activarse contra funcionarios que incurren en abusos de poder, para que responda quien causa el daño, no el pueblo hondureño. La omisión de la Procuraduría, en este caso, podría significar una complicidad institucional con la impunidad.

Orellana concluyó que mientras no se apliquen mecanismos legales correctivos, el Estado seguirá pagando errores ajenos, y el ciudadano común seguirá cargando con las consecuencias de la mala administración pública. Redacción Allan Cerrato.

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!