Puerto Cortés, Honduras.- La inestabilidad jurídica que emana de la crisis política hondureña ha colocado al país en el epicentro de la preocupación global. Así lo expone el exvicepresidente del Congreso Nacional y actual candidato a diputado por Todos Somos Honduras (TSH), Enrique Yllescas, quien advierte que organismos como Estados Unidos, la ONU y la Unión Europea observan con recelo la deriva institucional.
“Hoy Honduras comparte con Nicaragua el incómodo rótulo de ser ‘punto negro en página blanca’. Se violenta el Estado de derecho, se restringe la democracia electoral y se menoscaban los derechos humanos; esa mezcla espanta a cualquiera que pretenda invertir”, sostuvo.
Radiografía de la crisis
| Factor crítico | Manifestación | Efecto inmediato |
|---|---|---|
| Incertidumbre legal | Contratos estatales revocados y licitaciones impugnadas | Pérdida de confianza empresarial |
| Hostigamiento a la prensa | Demandas y amenazas a medios independientes | Deterioro del clima informativo |
| Procesos electorales opacos | Reformas parciales y reglas cambiantes | Riesgo de conflictos poselectorales |
| Conflictividad social | Paros, tomas y protestas permanentes | Paralización productiva |
La consecuencia más palpable es la fuga de capitales: el año pasado se reportó una caída del 27 % en la inversión extranjera directa (IED), mientras 3 600 micro y pequeñas empresas cerraron sus puertas, eliminando más de 68 000 empleos formales.
Voces empresariales y sindicales
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Cámara de Comercio: “Cada decreto inconsulto genera pánico financiero; el dinero migra a Guatemala, Panamá o El Salvador”.
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Coordinadora de Maquiladores: “La inestabilidad legal encarece los seguros contra riesgo político; eso nos vuelve menos competitivos frente a Costa Rica”.
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Central Obrera: “Sin inversión no hay empleos dignos; la informalidad ya bordea el 60 % de la fuerza laboral”.
¿Hay salida al laberinto?
Yllescas propone un “Pacto Nacional de Gobernabilidad” sustentado en cuatro pilares:
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Reforma electoral integral con veeduría internacional permanente.
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Fortalecimiento del Poder Judicial para garantizar sentencias previsibles y transparentes.
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Política fiscal estable que premie la reinversión y atraiga capital fresco.
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Diálogo multisectorial que incorpore a la sociedad civil, la empresa privada y los partidos políticos en torno a una hoja de ruta común.
“Sin reglas claras y sin respeto al Estado de derecho, la economía será rehén de la incertidumbre. La inversión no es patriota; busca refugio donde haya certidumbre”, subraya el dirigente.
El reloj corre
La comunidad internacional ya ha emitido señales de advertencia. Si no se restaura la confianza institucional antes de que concluya el año, Honduras podría encaminarse a lo que economistas llaman una ‘década perdida’ en crecimiento y competitividad.
En palabras de Yllescas, “la decisión está en nuestras manos: o reconstruimos la seguridad jurídica o veremos cómo se desangra la inversión y con ella las oportunidades para millones de hondureños”. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduraPrensa.Com