Tegucigalpa, Honduras.- La tensión entre las Fuerzas Armadas de Honduras (FFAA) y el periodismo independiente ha escalado a niveles preocupantes, luego de que comunicadores y gremios denunciaran una campaña de intimidación institucional tras los discursos críticos pronunciados durante la ceremonia del Premio Álvaro Contreras 2025.

Lo que debería ser una institución dedicada exclusivamente a la defensa nacional, hoy es señalada como un brazo político del oficialismo, dispuesto a silenciar voces incómodas a través de discursos, publicaciones y señalamientos que vulneran los principios democráticos y el derecho a la libertad de expresión.

«Sicarios de la comunicación»: ataque frontal desde lo institucional

La polémica estalló cuando el periódico oficial de las FFAA publicó un editorial titulado “Sicarios de la comunicación”, en aparente represalia a las denuncias hechas por el Colegio de Periodistas de Honduras (CPH) y por destacados comunicadores como Dagoberto Rodríguez y Rodrigo Wong Arévalo.

El periodista Dagoberto Rodríguez, galardonado con el Premio Álvaro Contreras, denunció represalias tras su discurso: “Tanto dolió, caló e incomodó en el poder nuestros discursos… Seguimos firmes”, expresó, responsabilizando al jefe del Estado Mayor Conjunto, general Roosevelt Hernández, y a la ministra de Defensa, Rixi Moncada, de cualquier amenaza contra él o su familia.

«Se nota que les dolió»: reacción del gremio

El presidente del CPH, Juan Carlos Sierra Galeas, calificó la publicación como un acto de persecución: “¡Qué pena por las FFAA! Se nota que el discurso del viernes ocasionó roña. Hago responsables al general Hernández y a la ministra Moncada de cualquier daño a mi integridad o la de mi familia”, declaró.

Sierra anunció que esta situación será llevada ante organismos nacionales e internacionales de derechos humanos, calificándola como “una escalada peligrosa desde el poder militar”.

¿Política oficial contra la prensa?

La reconocida periodista Thelma Mejía advirtió que la publicación no puede considerarse un acto aislado: “Esa portada, al llevar el logo oficial de las FF AA., representa una posición institucional y no individual. ¿Estamos frente a una política del Estado contra la prensa? Si es así, estamos en momentos de alta hostilidad contra la libertad de expresión”.

Uso de recursos públicos para atacar la crítica

Analistas señalan que la publicación desde un medio oficial de las FFAA representa una violación al principio de neutralidad institucional. Como entidad estatal, el rol de las Fuerzas Armadas no debe incluir acciones de ataque o señalamiento contra ciudadanos o medios de comunicación.

El periodista Armando Villanueva fue más allá, acusando directamente al alto mando militar: “Jamás las FFAA habían estado bajo el mando de un general tan cobarde, títere y vocero de políticos corruptos como lo es Roosevelt Hernández”.

Libertad de expresión en riesgo

Este tipo de acciones institucionales vulneran directamente el derecho a la libertad de expresión (Art. 19 del PIDCP) y ponen en riesgo la integridad de periodistas, al exponerlos como “enemigos del Estado” ante la opinión pública.

Organizaciones de la sociedad civil y gremios de prensa ya han comenzado a levantar alertas nacionales e internacionales. La comunidad internacional observa con atención esta confrontación, que se da en un contexto electoral cada vez más polarizado.

¿Un retroceso democrático?

La actitud beligerante de la cúpula castrense remite a etapas oscuras de la historia hondureña, donde la represión política y la censura marcaron la agenda estatal. Hoy, la democracia se ve tensionada por un poder armado que parece actuar más como actor político que como garante institucional. “Esto no abona al debate democrático. Tener las armas no los hace dueños de la verdad”, concluyó Thelma Mejía. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!