Tegucigalpa, Honduras.- En un mensaje institucional cargado de advertencias y llamado a la acción, la directora ejecutiva del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), Gabriela Castellanos, encendió las alarmas este miércoles sobre graves deficiencias en el proceso electoral hondureño, a solo meses de las elecciones generales.
“La corrupción también vota”, fue la frase central de su pronunciamiento, con la que denunció un ambiente de incertidumbre y vacíos institucionales que amenazan con socavar la confianza ciudadana en el sistema democrático.
Castellanos cuestionó directamente el silencio o tibieza de las autoridades electorales, que en lugar de disipar dudas, “han permitido que crezcan y se profundicen”. Uno de los puntos más sensibles señalados por la titular del CNA es la falta de claridad en la entrega del Documento Nacional de Identificación (DNI) a la diáspora hondureña.
“Estamos hablando de más de 400 mil nuevos votantes potenciales en el extranjero, una cifra abismal comparada con los apenas 15 mil habilitados en 2021, de los cuales solo 375 ejercieron el sufragio”, enfatizó. Añadió que no existen fechas oficiales, cronogramas definidos ni logística clara para garantizar el derecho al voto de esta población, que es clave tanto por su número como por su rol económico: “Hoy son el principal sustento de la economía nacional”, remarcó.
También criticó una propuesta que permitiría entregar el DNI mediante terceras personas, calificándola como una maniobra riesgosa. “Las reglas del juego no se deben cambiar en pleno año electoral. Eso no es inclusión, es apertura al fraude”, advirtió.
Castellanos no se detuvo ahí. Cuestionó el accionar del Consejo Nacional Electoral (CNE) y los presuntos conflictos de interés entre algunos de sus miembros. “Cuando los funcionarios que deben ser árbitros actúan como activistas políticos, la imparcialidad no solo se pone en duda: se pierde”, dijo.
Además, alertó sobre la posible eliminación de la verificación manual de actas en el sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), una modificación que tachó de “vulnerabilidad calculada”. Según Castellanos, esta verificación es un candado de seguridad esencial para evitar manipulación digital de los resultados.
“Quitarla no es modernización. Es debilitar la confianza ciudadana. La transparencia no se predica, se garantiza. Y no olvidemos: la corrupción también vota”, concluyó, en lo que muchos analistas consideran una de sus intervenciones más directas contra los riesgos del proceso electoral 2025. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com