Tegucigalpa, Honduras.- El gobierno de Honduras ha anunciado el lanzamiento de un nuevo programa social denominado “Hermana y Hermano, vuelve a casa”, cuyo objetivo es brindar apoyo integral a los migrantes hondureños que son deportados desde Estados Unidos.

La presidenta Xiomara Castro mostró su preocupación por la situación de los hondureños en el extranjero, especialmente en cuanto a las condiciones que enfrentan al regresar al país tras ser deportados. Este programa busca ofrecer una solución concreta a la difícil situación que atraviesan cientos de miles de hondureños que regresan al país sin recursos.

El anuncio fue hecho este sábado por el canciller Enrique Reina, quien detalló que el gobierno hondureño ha diseñado una serie de medidas para garantizar el bienestar de los deportados. “Nos ha instruido desarrollar el programa ‘Hermana y Hermano, vuelve a casa’, que estará dirigido a los cientos de miles de hondureños que regresen”, expresó el canciller en declaraciones a los medios. El programa no solo ofrece apoyo económico inmediato, sino también un plan de reintegración social que promete ayudar a los migrantes a reinsertarse adecuadamente en su país de origen.

El bono solidario es una de las medidas más destacadas del programa. Este bono permitirá que los deportados tengan un apoyo económico inicial para su regreso a sus lugares de origen, lo que facilitará su integración y dará un respiro a aquellos que retornan sin recursos. Además, el gobierno hondureño proporcionará apoyo alimentario para los deportados, ayudando a cubrir sus necesidades básicas en sus primeros días tras el retorno.

Además del bono solidario, Enrique Reina subrayó que se implementará un programa masivo de empleos dirigido a los hondureños que retornan. “El objetivo es darle todos los insumos a los hondureños para que se sientan bienvenidos en casa y puedan desarrollarse nuevamente en Honduras”, comentó el canciller. Con esta medida, se busca proporcionar empleo y condiciones para que los deportados puedan reconstruir sus vidas, contribuyendo activamente a la economía local.

En cuanto a la seguridad y el orden en los procesos de deportación, el gobierno hondureño ha cooperado estrechamente con Estados Unidos para garantizar que los retornos sean seguros y ordenados, respetando en todo momento la dignidad de los migrantes. Los consulados de Honduras en EE.UU., México y Guatemala se han encargado de realizar visitas periódicas a los centros fronterizos, donde los migrantes son albergados antes de su regreso al país. Esto asegura que los hondureños reciban la atención que necesitan en su tránsito de vuelta a casa.

En la misma línea, el canciller indicó que actualmente hay alrededor de mil 700 hondureños detenidos en Estados Unidos. Sin embargo, no se ha recibido aún ningún requerimiento formal para su deportación. El gobierno hondureño está trabajando de manera coordinada con las autoridades estadounidenses para asegurar que los procesos de deportación se realicen de forma fluida y sin contratiempos. Además, Reina afirmó que está dispuesto a recibir al secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, para sostener una reunión y discutir la política migratoria, un tema de alta prioridad para ambos países.

El lanzamiento del programa “Hermana y Hermano, vuelve a casa” ha sido bien recibido por diversos sectores en Honduras, ya que representa una acción concreta del gobierno para abordar la crisis migratoria y apoyar a los hondureños que, tras ser deportados, necesitan de un sistema de apoyo para volver a empezar. Con este esfuerzo, Honduras espera mejorar las condiciones de vida de sus ciudadanos deportados y ofrecerles nuevas oportunidades en su país natal. Redacción Martha C.C.

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