Ciudad de Guatemala.- Guatemala vive un inédito paro nacional, tras una semana de bloqueos de carreteras, para exigir la renuncia de la fiscal general y jefa del Ministerio Público, Consuelo Porras, quien no contempla dejar su cargo.
Con más de 120 bloqueos en todo el territorio, el país centroamericano vive momentos álgidos tras una semana de manifestaciones en contra de Porras Argueta, a quien los manifestantes señalan de intentar modificar los resultados electorales de este año.
Durante los últimos siete días, las protestas tuvieron como origen carreteras y sedes del Ministerio Público, pero este lunes al menos 200 personas llegaron a una de las residencias de la fiscal general para exigir personalmente su renuncia.
Porras Argueta no se encontraba en el lugar, pero no se descarta que en las próximas horas los manifestantes busquen a la fiscal general en otras de sus residencias, al igual que a otros miembros de la Fiscalía.
En total fueron alrededor de 200 personas las que llegaron a la residencia de Porras Argueta, y certificaron, gracias al ingreso habilitado para algunos de ellos, que la fiscal general no se encuentra en el lugar.
Un inédito paro nacional
El inédito paro nacional, de gran magnitud, tiene pocos antecedentes históricos, siendo el más reciente el 27 de agosto de 2015 en contra del presidente en aquel momento, Otto Pérez Molina, quien renunció una semana después bajo acusaciones de corrupción.
Los centros educativos a todo nivel, además de comercios y mercados, han cerrado al menos por este lunes, pero los organizadores de las protestas han advertido que no dejarán los bloqueos hasta que Porras Argueta dimita.
«La corrupción es demasiada. Necesitamos unirnos y no vamos a soltar las vías hasta que renuncie», dijo a EFE Gerson González, un taxista bloqueando el paso en una de las calles de Ciudad de Guatemala.
Las manifestaciones fueron convocadas e iniciadas hace una semana por la organización indígena 48 cantones del departamento (provincia) de Totonicapán (oeste). Desde entonces, se han sumado diversos gremios, incluyendo universidades, médicos y comerciantes.
Los inconformes piden la dimisión de la jefa del Ministerio Público por intentar modificar los resultados de las elecciones celebradas en junio y agosto pasado, ganadas sorpresivamente por el académico Bernardo Arévalo de León.
«Estamos cansados de la corrupción y esta es una manifestación pacífica en favor de los derechos de todos», contó a EFE otro de los protestantes, sin identificarse, en un sector de la zona residencial Cayalá, a pocos kilómetros del centro de la Ciudad de Guatemala.
Arévalo de León ha reiterado desde el 1 de septiembre que la fiscal Porras encabeza un «golpe de Estado en curso», que tiene como objetivo evitar que asuma la presidencia el próximo 14 de enero.
Con información de EFE