El grupo terrorista Hamas conmemoró los dos años desde la masacre del 7 de octubre de 2023, calificándola como un “glorioso día de éxito” para el pueblo palestino.

El grupo terrorista afirmó que la masacre fue un “punto de inflexión significativo” en la región.

“Dos años después, el enemigo sigue con su guerra brutal contra el pueblo palestino, que se mantiene firme, y continúa con sus masacres contra civiles inocentes, mientras el mundo guarda silencio y los países árabes los abandonan de una manera sin precedentes”, dice.

La declaración conmemoró a los líderes terroristas que han sido abatidos a lo largo de la guerra, entre ellos Ismail HaniyehYahya SinwarSaleh al-Arouri y Mohammed Deif.

La reivindicación se produjo mientras Hamas mantiene negociaciones indirectas con Israel en la ciudad egipcia de Sharm el Sheik sobre un plan de paz propuesto por el presidente estadounidense Donald Trump. El portavoz del Ministerio de Exteriores de Qatar, Majed al Ansari, aseguró que la entrega de los rehenes israelíes en manos de Hamas significará el “final de la guerra” en la Franja de Gaza.

Hamas acepta dar armas a comité egipcio-palestino y rechaza gestión internacional de Gaza

Según una fuente palestina conocedora de las negociaciones que habló con la agencia EFE, Hamas aceptó entregar sus armas a un comité egipcio-palestino, pero rechazó categóricamente entregar la gestión de la Franja de Gaza a un comité internacional de transición. El movimiento también aceptó la entrada en Gaza de fuerzas de seguridad palestinas que están siendo entrenadas en Egipto y Jordania.

Sin embargo, el grupo rechaza la presencia del ex primer ministro británico Tony Blair como gobernador de Gaza, aunque acepta que asuma una función de supervisión remota. Hamas no acepta la idea de crear un comité internacional de transición, de acuerdo con el plan de Trump.

El grupo propuso que una delegación de Hamas encabezada por su jefe negociador, Khalil al Haya, maneje las negociaciones con Israel a través de mediadores, mientras que un segundo equipo del movimiento negocie con la Autoridad Palestina para entregar la administración de la Franja a un comité administrativo afiliado al gobierno palestino.

Hamas exigió un alto el fuego en el enclave palestino y en el espacio aéreo israelí sobre Gaza para recoger a los rehenes israelíes de sus lugares de retención, lo que se daría en el plazo de una semana. El movimiento también acordó que se permita a cualquiera de sus líderes abandonar Gaza y exigió garantías a Estados Unidos de que no serán perseguidos.

Al Ansari señaló que los resultados de las conversaciones indirectas entre Hamas e Israel con la participación de los mediadores —EgiptoQatarTurquía y Estados Unidos— sobre el plan de Trump no serán “temporales, sino definitivos”. Las negociaciones comenzaron el lunes con “cuatro horas de intensas y meticulosas conversaciones para identificar los llamados cuellos de botella u obstáculos”, según el portavoz catarí.

“Trabajamos con los socios estadounidenses para garantizar que esta propuesta no sea temporal, sino duradera y se mantenga vigente”, dijo Al Ansari. “Por ello, nuestros esfuerzos se centran en traducir la propuesta en medidas prácticas sobre el terreno, que deben implementarse de forma gradual, sin dar a Israel la oportunidad de reanudar su beligerancia en la Franja de Gaza”.

La primera fase del plan de Trump estipula la liberación por Hamas de todos los 48 rehenes israelíes, vivos y muertos, que el grupo mantiene retenidos desde el ataque del 7 de octubre de 2023 a cambio de la excarcelación por Israel de cientos de prisioneros palestinos. La propuesta también contempla la desmilitarización de la Franja y la posibilidad de negociar en el futuro un Estado palestino.

Hamas está representado en las negociaciones por una delegación encabezada por Al Haya, que salió ileso junto a otros miembros de su equipo del bombardeo israelí del 9 de septiembre en Qatar. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ordenó al ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, encabezar la delegación israelí, pero finalmente pospuso su llegada hasta el miércoles, coincidiendo con la del enviado especial estadounidense para Oriente Medio, Steve Witkoff, y del yerno de Trump, Jared Kushner

¡DIOS BENDIGA A HONDURAS!