Tegucigalpa, Honduras.- Los productores del Valle de Jamastrán en el departamento de El Paraíso están celebrando un año prometedor con una exitosa cosecha de maíz y frijol. Este logro ha sido impulsado en gran parte por las condiciones climáticas favorables y el apoyo del Bono Tecnológico Productivo, otorgado por la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG). Las lluvias de la temporada han sido un factor clave en el crecimiento y desarrollo de los cultivos, generando optimismo entre los agricultores.

Gloria Hernández, una productora de la región, comentó: «El trabajo en el campo lo sabemos hacer muy bien, y con el bono no solo nos ha beneficiado con las cosechas, sino que nos da esperanza para la economía de nuestras familias». El Bono Tecnológico Productivo ha sido un pilar importante para el desarrollo agrícola de la zona, proporcionando insumos agrícolas esenciales para los agricultores.

En El Paraíso, la siembra de primera ha sido más exitosa que en años anteriores. Gracias a la entrega de más de 28,000 bonos y la distribución de más de 55,000 insumos agrícolas, los productores de maíz y frijol se han visto enormemente beneficiados. Estos dos cultivos son fundamentales en la dieta básica hondureña y se espera que la producción de este año supere la del año anterior.

En 2023, se alcanzó una producción nacional de 7.1 millones de quintales de maíz y 1.4 millones de quintales de frijol, lo que representó el 41% de la producción nacional de este último grano. Con el impulso del Bono Tecnológico Productivo, los agricultores esperan superar estas cifras en 2024 y contribuir significativamente a la seguridad alimentaria del país.

La inversión en el sector agrícola ha sido clave para este crecimiento. Según la SAG, al mejorar la capacidad productiva de los pequeños agricultores, no solo se fortalece la producción local, sino que también se apoya la economía nacional. Los pequeños productores están recibiendo las herramientas necesarias para mejorar la productividad y con ello garantizar el sustento de miles de familias.

En conclusión, el Valle de Jamastrán está viendo los frutos del esfuerzo combinado entre los productores locales y las políticas implementadas por el gobierno. Los resultados positivos en la cosecha de maíz y frijol auguran un futuro más próspero para el sector agrícola y la economía de la región. Redacción Laura Valladares.

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