Tegucigalpa, Honduras.- En un giro preocupante para la democracia hondureña, la Sala Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) ha sido objeto de un golpe institucional, según denuncias de la magistrada Isbela Bustillo Hernández. En un acto que ha suscitado alarma tanto dentro como fuera del país, la presidenta de la CSJ, Rebeca Lizeth Ráquel Obando, ha oficializado cambios en la integración de las salas del Poder Judicial, ignorando el orden de precedencia establecido.

Bustillo Hernández ha advertido que estas acciones reflejan el peligroso camino hacia regímenes autoritarios, que históricamente desembocan en dictaduras. «Estamos presenciando el inicio de un grave deterioro institucional que no podemos ignorar», declaró la magistrada.

El cambio en la integración de las salas ha sido particularmente notorio en la Sala Constitucional, donde se ha designado al magistrado Wagner Vallecillo en lugar de Luis Fernando Padilla Castellanos, ignorando el orden de precedencia establecido por la presidencia de dicha Sala. Esta alteración ha generado indignación entre los magistrados y ha provocado comparaciones con épocas oscuras de concentración de poder en manos de unos pocos.

En un intento por justificar estos cambios, la presidenta Ráquel Obando ha señalado que se trata de una medida amparada por el Reglamento Interior de la CSJ, argumento que ha sido rebatido por diversos sectores legales y de la sociedad civil. La decisión de Obando ha sido criticada por su falta de apego a la Constitución de la República y al reglamento interno de la CSJ.

Ante este escenario, varios magistrados de la CSJ han expresado su preocupación por el impacto negativo que estas acciones pueden tener en el estado de derecho y la estabilidad institucional del país. Asimismo, voces de la sociedad civil han instado a respetar el ordenamiento jurídico y han exigido transparencia en el proceso de toma de decisiones dentro del Poder Judicial hondureño.

En medio de la incertidumbre y la controversia, la comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos en Honduras, instando al respeto de los principios democráticos y el estado de derecho. La situación en la CSJ plantea desafíos importantes para la consolidación de la democracia en el país centroamericano, y su resolución requerirá de un diálogo constructivo y el pleno respeto a las instituciones democráticas. Redacción Bruce Villatoro CEO HonduPrensa.Com

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