Tegucigalpa, Honduras.- Honduras recibe diez veces más ingresos por remesas familiares que por inversión extranjera directa (IED), según el Boletín Competitivo Regional publicado este jueves por el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep). Esta alarmante proporción evidencia una creciente dependencia de los flujos enviados por los migrantes, frente a la escasa atracción de capital productivo que impulse el desarrollo sostenible del país.
El informe revela que por cada dólar que ingresa al país en forma de IED, se reciben diez dólares en remesas, una relación que refleja desequilibrios estructurales en la economía hondureña. Mientras las remesas permiten cubrir necesidades inmediatas como alimentación, vivienda y educación, no generan empleos formales ni fortalecen sectores estratégicos de la producción. “La inversión extranjera trae consigo tecnología, innovación y empleos de calidad, mientras que las remesas están destinadas al consumo, y pueden incluso incentivar la informalidad laboral”, advirtió el Cohep.
📉 Triángulo Norte, rezagado frente a Costa Rica
Durante los primeros tres trimestres de 2024, Honduras, Guatemala y El Salvador captaron en conjunto 2,211.6 millones de dólares en IED, cifra que fue superada individualmente por Costa Rica, con 2,617 millones de dólares en el mismo periodo.
En contraste, las remesas enviadas a los tres países centroamericanos ascendieron a 29,238 millones de dólares, reafirmando el papel protagónico de este ingreso en la economía de millones de hogares. Sin embargo, el informe advierte que este flujo no contribuye directamente a la transformación productiva ni al crecimiento económico de largo plazo.
🛠 Baja productividad y obstáculos estructurales
El estudio también pone el foco sobre la baja productividad laboral de Honduras, que se sitúa por debajo de los 10 dólares por hora trabajada, una de las más bajas de la región. En contraste, Panamá lidera con 42.9 dólares y Costa Rica con 30.3 dólares por hora.
Además, el país enfrenta retos en libertad económica y progreso social. Honduras aparece catalogado como “mayormente no libre” en el Índice de Libertad Económica, con retrocesos en apertura comercial y eficacia judicial. En el Índice de Progreso Social 2025, también se posiciona por debajo de sus vecinos, especialmente en educación, salud y sostenibilidad ambiental.
🚨 El gran reto: transformar remesas en desarrollo
El Cohep concluye que el verdadero desafío para Honduras es canalizar parte del flujo de remesas hacia actividades productivas, promoviendo alianzas público-privadas, incentivos fiscales y políticas activas de atracción de inversión.
Solo así el país podrá transitar de una economía basada en el consumo, a una capaz de generar empleos dignos, innovación y competitividad a nivel regional. Redacción Laura Valladares