Tegucigalpa, Honduras.- El vicepresidente del Congreso Nacional, Hugo Noé Pino, ha desatado controversia al asegurar que los señalamientos de corrupción en el gobierno de la presidenta Xiomara Castro son únicamente “percepciones”. En una entrevista en el programa 30/30, Pino defendió que no existen casos concretos de corrupción que se puedan señalar en la administración actual, atribuyendo las críticas a un imaginario colectivo influenciado por el pasado.

Honduras sin Fondos de la Cuenta del Milenio
Los recientes índices de corrupción han sido una barrera para que Honduras acceda a los fondos de la Cuenta del Milenio, una situación que Pino considera previsible. Según el legislador, ya se había anticipado que el país no calificaría este año, una realidad que, según él, no sorprende debido a factores estructurales heredados de gobiernos anteriores. A su juicio, los medios de comunicación exageran estas percepciones de corrupción.

Desempeño en Indicadores de Corrupción
Pino insiste en que la falta de pruebas concretas descalifica los informes de corrupción. El economista Roberto Lagos alerta que Honduras se sitúa en el puesto 24 de 28 países en la región, una clasificación que excluye al país de la Cuenta del Milenio. Según Lagos, esta posición es resultado de la baja percepción de transparencia en el gobierno actual.

Fondo de la Cuenta del Milenio y su Impacto en Honduras
La Corporación del Desafío del Milenio (MCC), administradora de los fondos, establece criterios que buscan fortalecer las instituciones de países en desarrollo. Estos fondos, que benefician sectores como infraestructura, educación y salud, requieren altos estándares de gobernanza y libertad económica. Honduras, al no cumplir estos requisitos, ve frustradas sus oportunidades de crecimiento sostenible bajo el apoyo de la MCC.

Perspectiva de Pino sobre los Resultados de Evaluación
Pino asegura que los avances en algunos indicadores de desarrollo responden a la salida de otros países de la evaluación. Sostiene que las evaluaciones no siempre reflejan la realidad de cada nación, sino que dependen del comportamiento relativo entre países. Esta explicación, sin embargo, ha sido cuestionada por expertos que advierten de los riesgos de minimizar los problemas de transparencia y rendición de cuentas.

Con estas declaraciones, el vicepresidente del Congreso parece buscar desviar el foco de atención de la administración de Xiomara Castro hacia un problema más estructural y arraigado en la cultura política del país. Alejandro C.

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