Tegucigalpa, Honduras.- La Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT) confirmó que más de 11,000 licencias de conducir han sido decomisadas en lo que va del año debido a faltas graves e imprudencia al volante, lo que refleja una creciente crisis de seguridad vial en Honduras.
Rixi Montoya, vocera de la DNVT, alertó que tan solo el pasado fin de semana se retiraron cerca de 1,000 permisos, una cifra que pone en evidencia la urgencia de frenar conductas irresponsables en las carreteras del país. “Este 2025 ya contabilizamos más de 10,800 licencias retiradas por faltas graves. La situación es preocupante. Estamos reforzando operativos para reducir accidentes, especialmente por estado de ebriedad”, declaró Montoya.
Multas altas, reincidencia y suspensión definitiva
Montoya explicó que los conductores ebrios enfrentan sanciones severas, desde multas equivalentes a un salario mínimo (aprox. 14,000 lempiras), hasta la cancelación definitiva de la licencia en casos de reincidencia. “Si es la primera vez, la multa equivale a un salario mínimo; la segunda vez, se duplica; y la tercera, se pierde la licencia de forma permanente”, recalcó.
Motociclistas: los más vulnerables en las vías
La vocera también señaló que los motociclistas siguen siendo los más expuestos a accidentes fatales.
“De cada 10 accidentes de tránsito, 7 involucran a motociclistas. Es vital que todos asumamos una conducción responsable y consciente”, enfatizó Montoya.
Un llamado a la conciencia vial
La DNVT reiteró que continuará con operativos a nivel nacional y campañas de concientización para reducir los altos índices de siniestralidad. “La vida no se repone. Manejar con responsabilidad es un deber de todos”, concluyó. Redacción Wendoly V.V.