Tegucigalpa, Honduras.- La congresista estadounidense María Elvira Salazar no dudó en recalcarle a la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, que «¡hay un nuevo Sheriff en el pueblo!» al referirse al reciente fracaso de la cumbre convocada por la mandataria centroamericana.
En un mensaje contundente en su cuenta de X, Salazar subrayó que la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), que estaba siendo promovida como un acto de confrontación contra el presidente estadounidense Donald Trump, tuvo que ser cancelada debido a la falta de apoyo y participación de otros países de la región.
La cita virtual, que había sido organizada por Castro a petición del presidente colombiano Gustavo Petro, pretendía reunir a los líderes latinoamericanos y caribeños después de un choque diplomático entre Trump y varios países de la región, principalmente por la política migratoria estadounidense. Petro había solicitado este encuentro después de que el gobierno de Trump rechazara recibir vuelos con deportados. Sin embargo, la Casa Presidencial de Honduras confirmó que la cumbre no logró el respaldo esperado, ya que varios países no confirmaron su participación ni de forma presencial ni virtual.
María Elvira Salazar, quien ha sido una firme crítica de las políticas de Castro, calificó el evento como un «show anti-Trump» y expresó en redes sociales que la cumbre no solo había fracasado, sino que también reflejaba la desconexión de la presidenta hondureña con la realidad política actual de la región. “Los líderes latinoamericanos saben lo que Xiomara Castro no entiende: el contexto ha cambiado, hay un nuevo Sheriff en el pueblo”, dijo la congresista.
La referencia al «nuevo Sheriff en el pueblo» es un claro mensaje al cambio de liderazgo en Washington. Nayib Bukele de El Salvador, Javier Milei de Argentina y Daniel Noboa de Ecuador son ejemplos de mandatarios que se han mostrado más cercanos a las políticas de Trump y que, según Salazar, han entendido el nuevo panorama político y geopolítico de la región.
El fracaso de la cumbre, que pretendía alinearse con un enfoque anti-estadounidense, deja en evidencia que no todos los gobiernos latinoamericanos comparten la visión de Xiomara Castro. La presidenta de Honduras parece estar en desacuerdo con las nuevas dinámicas políticas que marcan la agenda regional. La política migratoria de Trump, que incluye medidas como redadas migratorias y acuerdos de tercer país seguro, ha creado fricciones entre varios gobiernos y la Casa Blanca.
El distanciamiento de los gobiernos latinoamericanos con Trump y sus políticas podría ser uno de los factores clave que expliquen el fracaso de la cumbre. Sin embargo, lo que parece claro es que, como bien lo recordó María Elvira Salazar, hay un cambio de liderazgo en Washington y Xiomara Castro aún no ha logrado captar las señales de esa nueva realidad.
En conclusión, el fracaso de la cumbre CELAC no solo es un golpe diplomático para la presidenta Castro, sino también un claro recordatorio de que la política exterior de los Estados Unidos está bajo una nueva dirección y que los líderes latinoamericanos están tomando nota de ello. La reflexión de María Elvira Salazar sobre el nuevo Sheriff en el pueblo resuena con fuerza en el contexto actual, dejando claro que las alianzas y enfoques en la región están cambiando rápidamente.