Tegucigalpa, Honduras.- El juicio contra Midence Oquelí Martínez, exdiputado hondureño, ha dejado entrever nuevas acusaciones que involucran a Óscar Nájera, también exlegislador. Durante las declaraciones, se señaló a Nájera como presunto colaborador en actividades ilícitas relacionadas con el narcotráfico, generando un impacto mediático en la esfera política del país.
En la audiencia, los fiscales expusieron pruebas que vinculan a Nájera con operaciones de lavado de dinero y tráfico de drogas, respaldadas por testimonios de colaboradores eficaces. Según las evidencias presentadas, ambos exdiputados habrían mantenido lazos con cárteles internacionales que operan en Honduras. Estos señalamientos fortalecen los argumentos contra Martínez y amplían la investigación hacia nuevas figuras políticas.
Los vínculos de Óscar Nájera con el narcotráfico ya habían sido mencionados en investigaciones previas de organismos internacionales, pero este juicio añade un nuevo capítulo a las acusaciones. La Fiscalía de Estados Unidos y la DEA han mostrado interés en los hallazgos, lo que podría derivar en procesos judiciales adicionales en cortes norteamericanas.
Analistas consideran que este caso marca un precedente en la lucha contra la corrupción política en Honduras, ya que involucra a actores clave en estructuras delictivas. Mientras tanto, Nájera ha negado categóricamente las acusaciones, calificándolas de «infundadas» y parte de un complot político para dañar su imagen pública.
La sociedad hondureña observa con atención el desarrollo del juicio, exigiendo transparencia y un combate efectivo contra la impunidad. La presión internacional también es evidente, con llamados a las autoridades locales para actuar con rigor y garantizar que los involucrados en delitos de narcotráfico enfrenten la justicia.
El caso de Midence Oquelí y las menciones de Óscar Nájera podrían ser un parteaguas para la depuración del sistema político hondureño. Organismos civiles han solicitado la activación de mecanismos de cooperación internacional para fortalecer el proceso judicial y evitar interferencias que comprometan su integridad. La lucha contra el narcotráfico y la corrupción sigue siendo un reto fundamental en el país. Redacción QuienOpina.Com