Florida, EE.UU. – Donald Trump, candidato presidencial republicano, se salvó de un peligroso incidente con disparos cerca de su campo de golf en Florida el domingo. Agentes del Servicio Secreto respondieron de inmediato al avistar a un individuo armado en las cercanías mientras Trump jugaba golf, según fuentes policiales. Aunque no hubo heridos, el suceso ha generado gran preocupación en el entorno político.
La persona armada huyó en una SUV, siendo detenida poco después por la policía local en un condado cercano. Las autoridades, que prefieren mantener el anonimato, han confirmado que están investigando «lo que parece ser un intento de asesinato» contra Trump. El FBI se ha unido a la investigación para esclarecer los motivos detrás del incidente.
El departamento de policía del condado de Martin comunicó que, tras una intensa búsqueda, lograron detener un vehículo en la carretera interestatal 95, arrestando al sospechoso vinculado al intento. Este arresto se produjo gracias a una alerta emitida por la policía del vecino condado de Palm Beach. Fotografías publicadas muestran a la SUV detenida rodeada por múltiples vehículos policiales.
El jefe policial William Snyder informó que el sospechoso «no estaba armado cuando fue sacado del automóvil» y mostró una actitud sorprendentemente calmada. «Nunca preguntó: ‘¿de qué se trata esto?'», señaló Snyder, indicando la extraña tranquilidad del individuo pese a la gravedad del evento. En el lugar se recuperó un arma tipo AK, aumentando las especulaciones sobre las intenciones del sospechoso.
El campo de golf fue parcialmente cerrado durante el incidente. Los agentes del Servicio Secreto, que estaban a varios hoyos de distancia de Trump, actuaron rápidamente al observar al individuo empujando lo que parecía el cañón de un arma a través de la cerca. Fue entonces cuando dispararon en respuesta, asegurando el área y trasladando a Trump a un lugar seguro.
El expresidente se encuentra bien, según declaraciones del Servicio Secreto y de su equipo de campaña. Posteriormente, Trump fue trasladado a su club en Mar-a-Lago, confirmaron fuentes cercanas. Este evento ocurre a tan solo dos meses de un intento previo de asesinato contra Trump durante un evento en Pensilvania, lo que ha aumentado las preocupaciones sobre su seguridad.
La reacción internacional no se hizo esperar. La Casa Blanca comunicó que tanto el presidente Joe Biden como la vicepresidenta Kamala Harris fueron informados de la situación. Harris, a través de un mensaje en X, expresó su alivio por la seguridad de Trump, condenando la violencia en el país. Mientras tanto, el senador Lindsey Graham, uno de los principales aliados de Trump, declaró que el exmandatario se encuentra «de buen ánimo» y sigue siendo «una de las personas más fuertes» que conoce.
Este incidente refuerza las medidas de seguridad en torno a Donald Trump. Desde el intento de asesinato en julio, su equipo ha implementado estrictas precauciones, como una muralla de camiones alrededor de la Trump Tower en Nueva York y vidrios antibalas en eventos al aire libre. La investigación continúa mientras las autoridades buscan respuestas sobre este preocupante suceso que ha puesto en alerta al equipo de Trump y a la nación entera. Redacción Bruce Villatoro CEO QuienOpina.Com