La Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó recientemente sobre el aumento de casos de covid-19 relacionados con la variante NB.1.8.1, la cual ha comenzado a circular con más fuerza en regiones del sudeste asiático y el Pacífico occidental, incluyendo China, Camboya, Hong Kong y Singapur.
Esta nueva variante, que ya fue clasificada como «bajo vigilancia» por el organismo sanitario, ha sido señalada por la agencia de salud china como la cepa dominante en el país, aunque las autoridades aún no consideran que represente un riesgo mayor en comparación con otras mutaciones del virus.
¿Qué se sabe sobre la nueva variante?
Según la última actualización de la OMS, publicada el 28 de mayo, aunque NB.1.8.1 y LP.8.1 están generando más contagios en algunas regiones, no hay evidencia de que causen enfermedades más graves o que representen un mayor peligro para la salud pública global.
Sin embargo, médicos en China han reportado síntomas más intensos, como dolor de garganta fuerte en algunos pacientes infectados con la nueva variante, lo que ha generado preocupación, especialmente ante la falta de transparencia con la que, según expertos, el régimen chino ha manejado las cifras reales de contagios y muertes desde el inicio de la pandemia.
Críticas al manejo del covid-19 en China
Expertos como el doctor Jonathan Liu, profesor en el Colegio Canadiense de Medicina Tradicional China, han puesto en duda los datos oficiales reportados por los CDC chinos, que aseguran que solo siete personas fallecieron por covid-19 en marzo de 2025.
“Con tasas epidémicas normales, esa cifra es poco creíble”, expresó Liu, comparando los datos con países como Canadá, donde las cifras mensuales superan las 200 muertes.
Además, Sean Lin, exmicrobiólogo del Ejército de Estados Unidos., señaló que China no ha informado sobre la gravedad de los casos, ni hospitalizaciones ni tasas de mortalidad, dificultando la evaluación global del impacto de la nueva cepa.
Otros países intensifican vigilancia
Corea del Sur, India y Taiwán ya respondieron ante el crecimiento de los casos. En Corea, las autoridades sanitarias instaron a vacunar a personas mayores y a quienes viven en centros de alto riesgo debido al aumento de contagios en regiones vecinas.
En la India, el ministro de Salud de Delhi pidió mantener la calma y aseguró que los síntomas de los pacientes son leves y similares a los de un resfriado común. Mientras tanto, Taiwán lanzó una alerta preventiva, aconsejando el uso de mascarilla y el lavado constante de manos, tras detectar un incremento de casos este mes.
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EE. UU. vigila la situación
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos confirmaron que solo se han detectado menos de 20 casos de la variante NB.1.8.1 en ese país. Hasta el momento, no ha sido incluida en los paneles oficiales de seguimiento por no alcanzar el umbral de circulación requerido.