Tegucigalpa, Honduras.- La violencia contra las mujeres en Honduras continúa cobrando vidas con una frecuencia alarmante, dejando al descubierto una profunda crisis estructural que trasciende la criminalidad común. Según datos del Observatorio Nacional de la Violencia de la UNAH, hasta el 13 de mayo de 2025, se han registrado 93 muertes violentas de mujeres, muchas clasificadas como femicidios.
Migdonia Ayestas, directora del Observatorio, subrayó que, pese a los reportes oficiales de reducción en los índices de criminalidad general, la violencia de género se mantiene firme, afectando a mujeres, niñas e incluso bebés recién nacidos. “Estamos hablando de entre seis y siete víctimas diarias. Lo más alarmante es que muchos de estos crímenes suceden dentro del núcleo familiar”, alertó Ayestas.
Los femicidios en Honduras reflejan no solo un fracaso en el control del crimen, sino una profunda crisis cultural y social, marcada por el odio, el ensañamiento y la impunidad. “Estas muertes no se deben normalizar. Cada una representa una vida perdida por la falta de protección del Estado”, enfatizó la experta.
Además, el país experimenta un repunte de homicidios múltiples. El Observatorio ha documentado 16 escenas múltiples con 57 víctimas, cinco casos más que el año anterior en el mismo período.
Ayestas instó al gobierno a implementar estrategias integrales de seguridad que incluyan políticas públicas sostenidas enfocadas en la protección de mujeres y niñas. “No se trata solo de reducir cifras. Se trata de salvar vidas y construir espacios seguros para todas”, concluyó. Redacción Ruth Corrales