Tegucigalpa, Honduras.- En el marco del Día Mundial del Riñón, el reconocido doctor Carlos Umaña, especialista en nefrología, hizo un llamado urgente a la población y al gobierno de Honduras para fortalecer las acciones de prevención y mejorar las políticas de salud pública ante el alarmante aumento de casos de enfermedad renal en el país.
El doctor Umaña destacó que actualmente más del 10% de la población hondureña padece algún grado de enfermedad renal, una cifra preocupante que subraya la necesidad de generar medidas de prevención y detección temprana. Además, señaló que los tratamientos renales representan un 7.2% del presupuesto sanitario, lo que refleja el alto costo que enfrenta el sistema de salud para atender a los 5,700 pacientes que actualmente reciben tratamiento de diálisis.
«El crecimiento anual es de aproximadamente 1,600 pacientes por año, lo que nos lleva a una proyección de alrededor de 10,000 pacientes en tres a cuatro años si no se toman medidas inmediatas», explicó Umaña. Este crecimiento representa un desafío significativo para el sistema de salud, que necesita alternativas sostenibles, como la implementación de políticas públicas de trasplantes de riñón, para reducir el impacto financiero.
El especialista también señaló que las principales causas de la enfermedad renal son condiciones como la diabetes, hipertensión, obesidad e infecciones, además de los malos hábitos alimenticios y la falta de actividad física en la población. “Estas enfermedades están directamente relacionadas con el aumento de la enfermedad renal crónica”, añadió.
Umaña enfatizó que el Estado tiene la responsabilidad de crear leyes que beneficien a los pacientes renales, tales como la Ley Renal de Trasplante de Donante de Cadáveres y la Ley de Protección Social, para garantizar que los recursos y el tratamiento adecuado lleguen a quienes más lo necesitan.
Por último, el doctor Umaña hizo un llamado a la ciudadanía a adoptar hábitos de vida más saludables, lo que podría reducir el riesgo de desarrollar enfermedades renales y, en consecuencia, aliviar la presión sobre el sistema de salud pública de Honduras.
Acciones urgentes son necesarias para abordar la creciente crisis renal en el país y mitigar los efectos a largo plazo en la salud pública. Redacción Martha C.C.